¿Soy quien quiero ser? ¿Hago lo que quiero hacer? o de otra manera… ¿estoy en paz con todo lo que hago?

En un post anterior hablábamos sobre cómo estamos normalmente en dos estados bien diferenciados, en modo proactivo (estado de presencia) o modo reactivo (estado de ausencia). Una vez conocidos ambos estados la pregunta lógica sería ¿y cómo paso de uno a otro? Este es un punto muy interesante porque buscar los momentos en los que estás ausente es como buscar el momento exacto en el que te has dormido, no lo puedes saber muy bien. De hecho para dormirse hay que estar ausente, si estás concentrado en algo es difícil dormirte. Entonces, ¿en qué momentos estoy ausente? ¿en qué momentos no soy plenamente consciente de mis actos y mis pensamientos? La cruda realidad es que en la mayoría (al menos en mi caso y espero que en el de alguien más porque si no este artículo no tiene mucho sentido). La mayor parte del tiempo lo pasamos en piloto automático, dejando lo que los científicos llaman ahora Default Mode Network (o Red Neuronal por Defecto), esta red trabaja cuando no estamos enfocados en una tarea específica y trabaja mucho (por eso es tan difícil no pensar en nada). Es posible que no te hayas fijado pero cuando no estás centrado en algo estás haciendo ensoñaciones, planificando acciones futuras, revisitando recuerdos o relatándote tu propio día ¿te suena?. Esto es lo que hacemos cuando no estamos enfocados en una tarea específica, o cuando la tarea en la que estamos no nos requiere mucha atención, como montar en bicicleta o conducir. Como puedes ver estamos o repasando el pasado o imaginando el futuro.

Este proceso no es negativo ni mucho menos, nos ayuda a planificar, prepararnos para eventos futuros y para encajar lo que nos pasa en nuestra autoimagen. Es la vocecita que está continuamente hablando en tu cabeza. Si te ayuda es genial, pero si no, nos mantiene atrapados en discursos destructivos y repetitivos y no salimos de ahí, no apagamos la radio. Este diálogo es lo que nos tiene enganchados a nuestra propia imagen, creencias, nuestro ego… es como un río de palabras entremezcladas en ideas, creencias, argumentos… Atenuar e interrumpir este diálogo es esencial para generar cambios. Desconectar la Red Neuronal por Defecto es como un reseteo que permite hacer nuevas conexiones neuronales. Esto nos permite disolver (aunque sea un poco) el ego y estar más en contacto con uno mismo, o con tu ser esencial, o centro o como queramos llamarlo. Cabe añadir que hay que tomárselo con calma, es normal que al principio encuentres muchas dificultades en apagar la radio, es como un río que lleva mucha fuerza y no puedes controlar, pero no es imposible, basta con centrar tu atención en algo y mantenerla. Fácil ¿verdad? Quizás no tanto.

Pero volvamos a la pregunta inicial ¿cómo paso de un modo a otro? aquí presento un método muy sencillo. Tan sencillo que se les enseña a los niños para cruzar la calle. Stop, Look & Go! (Para, mira y ve! para los negados en inglés 😉 ) Son tres sencillos pasos, que se pueden desgranar en algunos pasos más, los que nos permiten pasar de un estado ausente a uno presente.

Primero y más importante STOP:

Si estás con tensión o te vienen pensamientos boicoteadores a la cabeza, PARA.

Vamos por la vida con prisa, nos paramos poco.

Haz unas respiraciones conscientes y profundas hasta que se rebaje el estado emocional, las tensiones se acumulan en el cuerpo y hay que ayudarle a que se libere de ellas (a liberarnos de ellas).

LOOK:

Una vez hemos bajado la tensión y calmado el estado interno nos paramos a MIRAR:

Observa tus pensamientos, observa tus emociones.

¿Es esto lo que quiero?

¿A dónde me está llevando esto?

Pregúntate ¿Quiero tener estos pensamientos? ¿Quiero sentir esto?

Si la respuesta es NO has de tomar el control y cambiar de rumbo.

En la situación en la que estás ¿Qué estás intentando conseguir? muchas veces nos vemos arrastrados en situaciones para las cuales no tenemos respuesta a esta pregunta, simplemente nos hemos dejado llevar. Pero si sigues preguntando podrás observar que sí estás intentando conseguir algo, posiblemente que alguien haga algo que tú quieres, o que no lo haga, o mantener tu estatus o algo parecido que estará relacionado con tu ego.

Piensa en positivo, ¿Puedo hacer algo diferente?

¿Puedo alcanzar ese objetivo de una forma más constructiva y positiva? ¿Cómo?

GO!:

Después de haber analizado la situación VE!:

Establece una nueva forma de actuar para conseguir tu objetivo (que posiblemente haya cambiado también) y chequea que no sea negativo para otras personas (como mucho que sea neutro).

Siente el cambio de emoción, más relajada y beneficiosa. Actúa.

Este algoritmo con la práctica se puede llegar a seguir en muy poco tiempo, sobretodo si te encuentras en una situación en la que ya has hecho este proceso alguna vez. Por ejemplo, una vez me descubrí en el coche estando enfadado y maldiciendo a diestro y siniestro. Alguien había cometido una infracción más o menos grave y se fue por otra dirección que la mía, pero lo curioso de la situación no es la gravedad de la infracción, si no el tiempo que hacía que se había cometido. Yo llevaba 5 minutos de malhumor y tensión por un suceso que ya había sucedido, del que no tenía ningún control y sobre el que poca influencia tengo para evitar en el futuro. Y seguí el protocolo. Paré mentalmente, me calmé un poco con unas respiraciones. Miré, me pregunté ¿qué estoy intentando? por inútil que parezca estoy intentando con mi enfado que la otra persona cambie su comportamiento, ¡a pesar de que ya no tenemos ningún contacto posible! ¿qué sentido tiene esto? ¿quiero conducir enfadado? llegué a la conclusión de que mi ego se sentía ultrajado por la infracción y la falta de disculpa. ¿qué puedo hacer diferente? Y actúe, pensé que en ese momento ya no podía hacer nada y lo mejor era conducir concentrado para conducir bien. Ahora cada vez que me pasa algo parecido y veo que me enciendo por dentro hago stop, look and go! y trato de mantenerme sereno y presente. (hasta que alguien me la vuelve a liar en la carretera XD)

Este método es sencillo y complejo a la vez, es sencillo de ejecutar una vez, pero difícil hacerlo muchas veces. Ayuda ponerse recordatorios para parar, es el primer punto y más importante, si no paramos es muy difícil salir del piloto automático. La atención nos está bailando constantemente y es fácil dejarse llevar por la mente y las situaciones y no estar plenamente consciente. Tampoco es que haya que estar plenamente consciente a todas horas, dejarse llevar y no pensar está bien también, pero cuando uno quiere conseguir algo o tiene dificultades con ciertas situaciones está muy bien tener esto muy presente, para estar alerta y ante la primera aparición de tensión chequearse con Stop, look and go!

Por último quiero mencionar que este método lo escuché por primera vez en esta charla TED. El Monje David Steindl-Rast propone este método como una forma de mostrar agradecimiento por las cosas, así consigue ser más consciente de las cosas que tiene, pensando en la maravilla que es tener todos los recursos que tenemos. Dice que la felicidad no lleva a la gratitud si no a la inversa, la gratitud lleva a la felicidad. Mostrar gratitud por las cosas me parece una práctica estupenda y que deberíamos realizar más.