En esas estaba cuando topé con una vieja carpeta tan desvencijada y descolorida, que ni siquiera se adivinaba cual había sido su color original. Estaba llena de notas, postales, folletos de todo tipo y condición, tan dispares unos de otros, que no conseguía encontrar por donde debía empezar a ordenar ese caos,  y de repente en medio de ese maremagnun un título llamó mi atención: NO TE DETENGAS, es un poema del autor norteamericano Walt Whitman, que por algún motivo había guardado hacía no sé cuantos años.

Ni siquiera sabía que estaba ahí, ni me acordaba de haberlo leído. Pero supe que no lo había conservado por casualidad, y que es en este preciso momento, de incertidumbre y preocupación, pero también de esperanza, de ilusión, de observar y tomar conciencia de las cosas realmente importantes, cuando toma significado:

 NO TE DETENGAS